Saturday, February 25, 2006

Cómo matar el amor en diez pasos

Paso número uno: monotonía. La tarea puede resultar difícil y tediosa. La repetición constante de una rutina suele embargar el corazón y nos obliga a caer en la costumbre. Esto en un principio no va a ocasionar mayores problemas, pero con el paso de los días, el corazón comenzará a fatigarse y terminará cediendo al olvido y al desamor. No obstante, es necesario que el interesado no deje de mostrar el hartazgo hacia su pareja, pues éste, se contagiará a tal modo que el sentimiento dimitirá lentamente.

Paso número dos: desinterés. Usted deberá empezar a mostrar desinterés por todo. En primera instancia su pareja debe sentir su ausencia no física sino emocional. Los pequeños detalles deben de dejar de importar para usted y la situación debe llegar a su pareja. Los regalos deben desaparecer y las reconciliaciones deben de postergarse lo más posible. El celular debe hacerse a un lado e incluso debe dejar de contestar las llamadas de su pareja. Posiblemente, en un principio se sienta un poco culpable, sin embargo, con el paso de los días dicho sentimiento se esfumará dejándole la satisfacción de estar recobrando su libertad.

Paso número tres: Ironía. Los comentarios irónicos no siempre son tomados a mal, sin embargo, debe buscar el momento exacto para hacer uso de ellos. Por lo general, funciona de manera perfecta el hecho de lograr que la pareja se enfade para realizar la combinación exacta de las palabras y resaltarle todos los defectos que la pareja posee. Este paso es bastante duro, pues debe estar preparado para recibir una retroalimentación que puede no ser muy grata.

Paso número cuatro: Incomunicación. No debe haber forma alguna de acercarse a su pareja mediante palabras. Si discuten, usted deberá dejar que las aguas se calmen solas y no debe hacer ningún intento por brindarle explicaciones a su pareja. Por las noches, limítese a decir “buenas noches”, sin agregar ningún tipo de calificativo cariñoso. Por las mañanas de los buenos días; recuerde que lo cortés no quita lo valiente. Si su pareja intenta hacer un esfuerzo por acercarse a usted, juegue su as bajo la manga y saque alguna excusa para no poder llevar a acabo la conversación, plática o encuentro.

Paso número cinco: Egoísmo. Debe pensar en su pareja como un algo que no merece nuestra comprensión, nuestro cariño, ni nuestro tiempo. Su pareja debe pasar a segundo, tercer o último plano dependiendo de sus prioridades en la vida. Su primera preocupación siempre debe ser la de satisfacer todas sus necesidades, ya sea sentimentales, monetarias, preferenciales o incluso sexuales. Si usted siente que su pareja le está quitando tiempo, desocupe ese tiempo y empléelo en algo que resulte en un beneficio propio. Si existen problemas, siempre acháquelos a su pareja y hágale saber que todo es culpa suya.

Paso número seis: Reproche. Toda acción que su pareja cometa y que llegue a tener una repercusión debe echárselo en cara, y reprocharle de manera directa, constante e iracunda. Procure gritarle todo lo que le molesta y culpe al otro de absolutamente todo lo malo que pasa en su vida. Si sucede algo bueno hágale ver que es gracias a usted y repróchele la cantidad de cosas que se han hecho mal contra todo lo bueno que ha hecho usted.

Paso número siete: Desencanto. Muéstrese totalmente distinto a como era cuando intentaba conquistar a su pareja. No tenga detalles ni muestras de afecto o de cariño. El uso de palabras cursis queda totalmente fuera de su vocabulario. Muéstrese rudo e incluso en las contestaciones deje entrever un tono seco de enfado y totalmente descortés.

Paso número ocho: Intolerancia. No deje pasar ninguna oportunidad. Cualquier cosa que pueda inquietarle, incomodarle o molestarle, hágala saber. No tolere berrinches, caprichos, reproches, reclamos, gritos. Usted no está para aguantar ninguna escena de celos ni teatritos de por qué llega tan tarde; por el contrario, su pareja sí está para esas cosas. No le permita llegar ni un minuto tarde, no deje que le levanten la voz o que se atreva a hacerle alguna insinuación. Si su pareja intenta voltear las cosas, no la escuche, muéstrese enfadado, harto y acuéstese a dormir.

Paso número nueve: Mentir. Comience a mentir constantemente acerca de sus salidas y asegúrese de que su pareja sepa que está mintiendo. Muéstrese como todo un profesional al inventar pretextos de lo más trillados para que su pareja sienta que usted la cree estúpida. No llegue a dormir a la casa y ponga de pretexto su trabajo. Emplee el mismo pretexto una y otra vez.

Paso número diez: Infidelidad. Este paso es, tal vez, el más difícil. Sólo es cuestión de tiempo, ya que el rumor de que usted anda con una persona del trabajo no tardará en llegar a oídos de su pareja. Ahórrese la molestia de que le interrumpan un acto, así que desde la primera vez que reciba una acusación por parte de su pareja acepte la acusación y muéstrese con total descaro. Si el resto de los pasos han fallado este le asegura el éxito para acabar con el amor.

Nota. Debe tener cuidado en la realización del procedimiento anterior, pues podría crearle mala fama y pésima reputación, truncando así, el desarrollo de relaciones futuras. Manéjese con cautela.

Extraño...

El delirio de mi boca ha cesado su insistir en el paraíso inerte de tu cuerpo... Con estigmas que subyugan mi cuerpo no he dejado de poseerte en mi mente. De pensarte en mis brazos y en mi boca. No ha existido nada que haya matado mi deseo, ni los golpes, ni el dolor, ni esa tortura insipiente que traspola mis sentidos hacia otro mundo, en otro universo y en un distante lugar.
Extraño tu boca, tus besos, tus manos deslizándose sobre mis senos. Extraño el roce de tu pecho sobre mi vientre y el delirio que me obligaba a amarte. Extraño tu existir, extraño tu cuerpo… Y aun me siento sola, enamorada de tu amor…

Monday, February 13, 2006

Die

No me basta la vida entera para imaginar la tortura de vivir sin tu amor,
Me reprocho a mi misma ese destino inefable que me quema por dentro
Esas ganas de gritar lo que estoy sintiendo y esta mordaza que me corta la respiración
Me estoy muriendo, porque mi corazón cada vez late más débil, preso de la agonía y de la estupefacción. Mi corazón no puede hacer mucho, no puede hacer nada y se queda solitario, tan hermoso, tan sutil y tan solemne, se va quedando callado y… ya no palpita más.

Thursday, February 09, 2006

12:59 A.M.

Mine

All my life I’ve been hiding behind an empty space where there is nothing but shadows. I’ve been trying to find a reason that will help me to find my way back home, and there’s nothing but darkness. It cannot be true that a person of your kind was able to compete with it because you are not like him; nevertheless, there is something in your eyes that makes me feel quite well. There is a light that keeps me safe from darkness and I know there is someone protecting me from any injure, at any time.

I’m not quite sure if you knew that, but you were the one. You were once that especial one whose best virtue is his heart. I have to admit that right now I’m more than scared, because I know that I let you go. I pushed you out from my life but you know what? It doesn’t matter anything that can be said, because I loved you once, and I can love you twice. I was happy with you in the past, and I know that there is nothing that can change that. You made me happy and I know I made you happy too.

I must confess that there is nobody who will make me ever forget our past, because even if you doubt it, you live in my present, and I know you are my future. Not like what we used to be when we were together, but as a light that’ll guide me trough my path. You’ll be with me as a light that will shine forever in my life, because of everything you brought into it. You are my best friend, my partner, my soul mate. You are so many things that I know that are beyond friendship, beyond love, beyond happiness. You are mine and that’s it, you’ll always be mine, and you know that. You are mine just in the same way that I’m sure that I’ll be yours forever. Did you know that? I loved you once, I’m completely certain about that. And if I loved you once, I can do it twice. You will be mine somewhere, sometime, I just don’t know how.